Fabián Núñez Ferrera nacido en Huelva
Capital lleva a gala haber fomentado una
vida cofrade un tanto atípica si la comparamos con la mayoría de las personas
inmersas en este mundillo. No procedo de una familia de las llamadas cofrades
aunque tampoco es que renieguen de ello. Lo cierto es que puedo decir sin temor
a equivocarme que lo mío es auténtica vocación. Mis comienzos son desde muy
pequeño cuando le pedía permiso a mis padres para salir a ver cofradías en
semana santa; y con un horario muy estricto en forma de “laudo parental” solía
pasearme por la calles de Huelva tan sólo acompañado por un paquete de pipas.
Recuerdo imágenes vividas en rincones como las revirás en el porche de San
Pedro; Calles como Tres de agosto; Arquitecto Pérez Carasa; Las Salidas desde
El Polvorín; Madre Ana; Matadero…
El caso es que un día con un
Itinerario en la mano, les dije a mis padres que quería “Hermanarme con una de
ellas”. Y tras intensas negociaciones me dieron la libertad de elegir
cualquiera, ya que como anteriormente he comentado no tengo antecedentes
parentales cofrades; y me decidí por “La madrugá”, por el Señor de Huelva. Más
tarde cuando mi Padre se entera de mi decisión no le hizo demasiada gracia eso
de tenerme con mi edad toda la noche fuera y tuve que cambiar de idea incluso
habiendo abonado un par de cuotas como hermano ( por aquel entonces era de 1000
Pts.). Fue entonces cuando por cercanía de mi casa me dirigí hasta la iglesia
del Polvorín y de entre todas las imágenes allí presente hubo una que me llamó
la atención de forma destacada. Aún no sé si fue por su postura, por su
vestimenta de entonces o por su tez agitanada, pero hubo una simbiosis entre el
Señor Caído y yo que no tardé mucho tiempo en aclararme. Desde entonces y hasta
la fecha hoy hay ni un solo día que no le pida ayuda para guiarme por el buen
camino de la vida.
Una vez que mis padres asintieron
para que me hiciese hermanos de Las Tres Caídas mi colaboración en la Hermandad
ha sido permanente pasando por las tres facetas que un Hermano de cualquier
corporación puede ejercer, primero como hermano colaborador en las distintas
labores que durante el curso cofrade en vigor depara; más tarde fui miembro del
Grupo Joven participando de forma muy activa en los proyectos que en esos años
nos marcábamos, y por último de la mano de Manuel Morón llegando hasta la
secretaría de esta Hermandad. Tras la legislatura de Manuel Morón inicie una
segunda con Francisco Nieto como Hermano Mayor teniendo que desistir de mis
funciones en la secretaría en su segundo año.
Al margen de estas referencias
pertenezco actualmente a la cuadrilla de Señor de las Penas amén de haber
sacados otros titulares como Dolores de Oración o Ntra. Sra. de la Caridad de
la Hermandad de la fe. También soy hermano de la Hermandad de Ntra. Sra. Del
Rocío de Huelva.
Por último si tuviera que definirme
como cofrade diría que no soy un cofrade de enciclopedia, no voy dando
clases ni repito al dedillo las historia
de cada hermandad, sino que soy cofrade de vivencias, de calle y de tertulias
con amigos. Me gusta dialogar con los veteranos de las hermandades ya que es
ahí donde está la sabiduría.
Fabián Núñez Ferrera